domingo, 26 de julio de 2009

Un día en el consultorio de la Nápoles

G: Hola, ¿doc?
K: Doctor Katz, buenas tardes, para ser menos coloquiales.
G: Está bien, ¿Usted pregunta o yo primero?
K: Bueno, te acostumbrarás a la dinámica de la terapia luego.
G: ¿Eso significa que yo pregunto primero? ¿te puedo tutear también?
K: Sería lindo...

1 sesión después

G: Fue desastroso, un experimento fallido sin duda.
K: Suele pasar cuando uno experimenta
G: Pero, ¿no son todas las relaciones un experimento?
K: Me parece que nos estamos enfoncando en una exclusividad de la terapia de pareja.
G: Basta de tecnicismos, che.
K: Quiero decir que es urgente que empieces de nuevo con todo
G: ¡No voy a dejarlo todo!
K: Sabes que no, recuerda que nos estamos enfocando en la terapia de pareja.
G: Ya entiendo.

5 sesiones después

HK: ¿Quieres que te consiga un poco de té?
G: Uy, perfecto, ¿sabes? adoro tu consultorio y tus post-impresionismos en la sala de espera.
HK: Me gustan mucho tus comentarios.
G: Tengo tanto que contarte en esta sesión.
HK: Soy todo oídos.

7 sesiones después

G: Pero por Dios, tenías toda la razón, un nuevo comienzo es lo que necesito.
H: Bueno, claro...
G: Entonces ¿Vamos por unos tragos, nuevo comienzo?
H: ¡Ja! 14 sesiones esperando esto
G: Vamos pues, Henry



Sal



pour maiqo dans son anniversaire

No hay comentarios:

Publicar un comentario